Acaricia a tu bebé a diario, él sentirá más tu amor que si
se lo dijeras.
Nuestro bebé acaba de nacer y con él toda una serie de
nuevas sensaciones por descubrir. El recién nacido va a comenzar a relacionarse
con el mundo que le rodea a través de los sentidos y es a través de ellos por
los cuales experimentará sus primeras impresiones, primer paso en el proceso de
formación de sus funciones cognoscitivas y afectivas, si bien su papel es mucho
más importante.
Es muy importante fomentar el contacto piel con piel, por
las sensaciones táctiles que tranquilizan al bebé, pero también por el olor de
la piel y el latido del corazón de los padres, algo que muchas madres tienen en
cuenta de forma instintiva y sostienen a sus hijos en el lado izquierdo, donde
puede escuchar los latidos que ha estado escuchando durante toda su gestación.
El sentido del tacto del bebé ayuda a los otros sentidos a
desarrollarse.
El recién nacido explora su fuente de alimentación (pecho o
tetina) a través de la sensibilidad bucal. El bebé ejerce la percepción táctil,
primero con la boca y después con las manos y las plantas de los pies.
El bebé recién nacido reconoce la mano de la madre que
sentía desde el vientre materno. El sentido del tacto juega un papel muy
importante en el desarrollo emocional del niño.
El masaje es una de las mejores formas de desarrollar el
sentido del tacto del bebé. Con esto los padres ayudan al bebé a desarrollar no
sólo su sentido del tacto, sino también la base emocional y su sentido de
bienestar. Darle un masaje a nuestro bebé se considera como la herramienta para
mostrarle la forma en que el bebé es cuidado y amado.
Uno no tiene que preocuparse de que el niño entienda. Por
instinto el bebé entiende por el toque que está sintiendo y por lo tanto se
siente amado y cuidado. Un toque cálido que un adulto le dé es de gran ayuda
para poder afrontar sus frustraciones y le aporta una sensación de ser amado.
Cuando el bebé cumpla los cuatro meses le encantará sentir
sus propios pulgares y demás dedos. Empezará a ponerse casi todo a la boca con
el propósito de sentir y saborear todas las texturas posibles.
A partir de los cuatro meses las cosas muy coloridas
atraerán su atención y es aquí cuando debemos aprovechar para proporcionarle
una buena estimulación, aprenderá con diferentes texturas, colores y juguetes
distintos. La sensibilidad de nada sirve si las cosas que tocamos carecen de
propiedades.
Hay que dar mucha importancia a que los niños tengan
sobradas oportunidades de desarrollar intensamente su sentido del tacto estando
en contacto con materiales y sustancias nobles, vivas, naturales.
Aproximadamente hacia el sexto o séptimo mes, el sentido del
tacto alcanza una gran evolución y, posteriormente, se irá especializando en
zonas concretas: yemas de los dedos, mejillas, etc.
No hay recetas mágicas, pero piensa en todas las cosas que
(con seguridad) puedes hacer para favorecer un desarrollo sensorial óptimo.
Evita los zapatos mientras no sean capaces de caminar, así también tocarán con
los pies y afianzarán el agarre; permite que agarre cosas del suelo siempre que
estés presente para que no trague piedras o se lleve a la boca elementos que
pudieran provocar asfixia por atragantamiento.
Puedes comprar juguetes blanditos con elementos de
estimulación sensorial, e incluso practicar el Baby Lead Weaning (la comida es
una fuente de experiencias que debemos tener en cuenta). Cuando el bebé tenga
un año coge una caja grande de calzado, fija la tapa con cinta de embalar, y
haz una abertura rectangular o cuadrada en la que quepan sus manitas. Llena la
caja de juguetes u objetos conocidos (como un envase de yogur líquido o una
pieza grande de construcción), ¡les encanta sacarlos de la caja y ayuda a
diferenciar formas y volúmenes!
Aunque vaya creciendo tu bebé, sigue llevándolo en brazos
tanto como sea posible, y practícale masajes tras el baño.
El tacto no solo da información sobre el entorno, sino que
también colabora en el desarrollo de la motricidad fina y la coordinación
motora; por todo ello merece la pena darle a este sentido la importancia que
tiene.
Algunos de nuestros juguetes que pueden ayudar en la estimulación del tacto:
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